El mundo perece en sus argumentos, el mal gobierna, oscurece los tiempos, pero aun en esta maraña de pensamientos me preservo, no dejo dañar mis sentimientos, el amor sigue siendo mi argumento, la razón de mi existir, el origen de mis versos, amo porque quiero, no me dejo contaminar por los vientos que cercan los aires, amo con sentimiento, si el amor pereciera, moriría yo con él, pero mi alma esquiva no acepta resentimientos, solo amor puro, amor del bueno, de ese que edifica a aquel que está muerto, al impío carente de discernimientos, vivo y muero, renazco cada día cuando el sol ilumina el firmamento, soy como yo quiero, unas veces dormido, otras veces despierto, pero siempre amo, ese es mi argumento..
Hughbarrish
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