No te entregues, nunca lo hagas, por muy oscura que sea la noche, por muy nublado que estén los aires y no te permitan ver más allá de tus narices, no te entregues, así no sientas nada, creas que estás vacío, así los sentimientos estén sedados, aunque las lágrimas formen un río y mojen tus pies cansados, no te entregues, aunque las heridas abiertas laceren tu cuerpo, desgarren tu alma, desfallezcas por el sol que quema tus labios, no importa, no te entregues, ese es el precio que debemos pagar los vencedores, los que no nos amilanamos a las circunstancias, pero es solo un estado pasajero, así las horas se vuelvan días, los meses años, porque al final verás el premio soñado, la piñata reventará sola, derramará sus regalos, el mal tiempo habrá pasado, solo serán recuerdos que no estarán presentes en tu postrer estado, bendición total, anhelos realizados, bonanza perfecta de los que nunca se acobardaron, de los valientes, de ti y de mi, seres perfeccionados...
Hughbarrish
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